Tierra del Fuego: Laboratorio natural para descifrar los misterios del mar

El reciente varamiento de orcas en Bahía San Sebastián moviliza a la ciencia fueguina, revelando la riqueza ecológica de la zona y los protocolos para preservar estos fenómenos naturales únicos.

La costa fueguina se transformó en un escenario de investigación científica tras el varamiento de orcas en la Bahía San Sebastián, un evento que permite vislumbrar el trabajo de los especialistas locales en uno de los ecosistemas más fascinantes del planeta. La bióloga Constanza Ordóñez, investigadora del Laboratorio de Mamíferos Australes del CADIC, relató la experiencia de trabajar en este entorno único: «Hicimos una campaña la semana pasada, entre el lunes y el miércoles, fuimos hasta allá a Río Grande y ahí pudimos ir a visitar a los animales que ya estaban varados y el nuevo varamiento de nuevos animales que no teníamos registrados».

Este fenómeno natural, aunque impactante, ofrece una oportunidad excepcional para comprender la vida marina en el confín del mundo. «Por lo que sabemos, al menos 15», señaló Ordóñez sobre el grupo de orcas, destacando que «de todo un grupo, ya ha habido casos, no en esta zona, pero sí en el Estrecho de Magallanes, y en Nueva Zelanda también, de este grupo de orcas, de este ecotipo de orcas, y normalmente son entre 19-20 animales». La investigadora enfatizó que estos eventos forman parte de la dinámica natural de estos ecosistemas prístinos.

Para quienes visitan estas latitudes, la científica explicó el protocolo a seguir ante estos hallazgos: «Manteniendo distancia, siempre, el animal muerto puede transmitir cosas también, así que ya hay otros animales que van a comer, entonces tratar de mantener la distancia». Esta recomendación busca proteger tanto a turistas como al frágel equilibrio ecológico. El destino final de estos ejemplares contribuirá al patrimonio científico regional, ya que «la idea es que se puedan colectar la mayor cantidad de muestras y si puede pasar de llegar a ir al museo tanto de Harberton u otros museos».

El proceso natural en este ambiente único sigue su curso: «Con el frío cuesta más que se descompongan, entonces capaz veo que se momifican, se secan un poco», describió Ordóñez, ofreciendo una visión del particular ciclo ecológico austral. Este evento destaca cómo Tierra del Fuego se consolida como un destino donde el turismo responsable y la investigación científica convergen para desentrañar los misterios del mundo natural.

(Fotos: Laboratorio de Investigaciones de Mamíferos Marinos CADIC-CONICET)